28 noviembre 2005

Esto va para el terapeuta, que no podía oirla
si si si, es a traición. un beso ;)



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23 noviembre 2005

22 noviembre 2005

A veces las palabras se acaban, dejando sensación de espejos rotos; se han repetido tanto que el significado se ha perdido, ha flotado en el tiempo. En ocasiones los sentimientos pinchan como agujas a fuego, dejando señales del afilado tormento. Las noches que se cierran en torno a los sueños, las caricias malgastadas, los besos no dados, y sólo queda el silencio. Hay lágrimas que no brotan, que se quedan dentro, hay sonrisas muertas desgarradas en la mueca de un afecto yerto. Hay razones, hay momentos en los que miras el océano y ni un paso de gigante te acercará la otra orilla. Hay poemas que se llevan dentro. Hay amores y hay sufrimiento. Ni la perla es la reina del mar, ni la cobra del desierto.

Bueno... 2...

Para los cusiosos (si es que los hay), ahí están visualmente tres momentos nocturnos. Los pantalones del camarero que nos llamaron tanto la atención, con ese movimiento de cadera, esa manera de llevar la bandeja, esa naricilla altanera que no véis, todo el tan joven y tan majo. Las primeras copillas ¿o sería ya la segunda ronda? y ese estupendo chico... como para no arrancarlo de la revista. Si alguien tiene uno así, por favor que me lo mande, que yo lo cuido bien.

21 noviembre 2005

Bueno...

La cena fue estupenda. El restaurante genial. Los camareros... todos para ser mirados, incluso... bueno... el francés.... bueno... que sólo se dirigia a mi cuando hablaba... bueno.... ja ja ja ja
No voy a contar mucho ahora, no tengo palabras y si un pelín de resaca.
Como muestra gráfica ahí va la cena que pedimos. La foto de los chicos, saliendo de El Armario, que es como se llamaba el restaurante que la pongan ellos si quieren. No puedo poner los nombre de los platos porque no me acuerdo de todos. La fila de arriba es lo que se pidió Nortestharj, su primer plato, su segundo y su postre. La segunda fila son los manjares de Mirador y la tercera fue lo rico-rico que pedí yo. La verdad es que la velada fue muy entretenida, mucha charla, muchas risas, muchas anécdotas, buena compañía, demasiadas copas, sí, para que vamos a negarlo y las ganas de repetirlo de nuevo. Porque la verdad es que una lo pasa genial con estos dos cabezas locas, que como buenos caballeros me dejaron en la puerta de casita casi al amanecer. Gracias chicos!!!!

16 noviembre 2005

El saber no ocupa lugar...

http://www.enlarecamara.com?p=

No hace falta que diga lo que se ve en la foto ¿verdad? sirva de introducción a un nuevo juego que ha propuesto LuCeZilla, en el cual he participado, comprometiéndome con ello a que continúe en mi Patio para que ella, si quiere, pueda venir a hacerme sus preguntas... es lo justo.

Asi que ahí lo dejo por si vosotros también queréis jugar. La reglas son simples:

Como máximo podéis hacerme en vuestros comentarios 5 preguntas que me comprometo a contestar, quien se implique en el juego, a su vez ha de darnos la oportunidad de poder hacerle los demás las preguntas oportunas.

Esta es la letras pequeña de este contrato... si no cumples con las normas tendrás 7 años de mala suerte :)

13 noviembre 2005



El dice que no tiene alma
Que no la reconoce dentro de si
Que se perdió en un navío
Que se alejó cruzando el mar bravío.

El dice que no sabe si escuchar al corazón
Si es la cabeza la que manda
Si es destino, si amor
Si es sólo una ilusión

El no llora porque tiene miedo de inundarse
De pesar por las lagrimas por su sal
Tiene miedo de no poder volar
Tiene miedo de amar
Tiene terror a odiar
A quedarse sólo con su soledad

Cruza el viento
Atraviesa tierras
Desenvaina espadas, lucha
Sin el miedo al dolor
Sin el miedo a mirar
Sin miedo a llorar si hay que llorar
De rabia, de celos
De amarga virtualidad

Y se rompe por dentro
y por dentro está hueco
¿Quién se llevó su risa?
¿Quién sus pensamientos?
¿Quien las alegrías?
¿Quién los tormentos?

11 noviembre 2005

Una vela para mañana...


...para que todo salga bien, para no preocuparse por nada y no tener nada que temer, se supone que la gente enciende velas para eso ¿no? para pedir, para desear, para tener la ilusión, la confianza, la esperanza de que mientras dure la luz, los deseos puedan hacerse realidad.
Ahí queda mi deseo, y seguro que se cumple, porque esta vela es dificil que se apague. Que he pagado todos los recibos.

09 noviembre 2005

La Sopa...



La vida a veces es como la sopa; tan espesa que casi hay que utilizar cuchillo y tenedor o tan caldosa que se nos acapa de la cuchara sin poder hacer nada. Otras nos sorprende con esos tropezones que nos dejan buen sabor de boca y a veces no podemos evitar que se cuele algo que nos amargue. La vida, como la sopa tiene sus momentos calientes; que queman, que te queman, dejándote la piel dañada. Otras se queda fría, por entretenerte en cuestiones que llenan tu cabeza, te quedas mirándola sin querer tomarla. Se te han quitado las ganas y quieres apartar el plato. Es necesario hacer un esfuerzo. Asi que templas tu vida, templas la sopa y sigues adelante. Sabiendo que quizá la próxima vez estará caliente de nuevo, porque es inevitable. Pero ahí es cuando ya has aprendido a soplar.

08 noviembre 2005

...

La melancolía en una dura compañera, tenaz e invisible. Se agolpa en tu interior, va encogiendo tu estómago con una sensación rara, inquieta. Como cuando abres la nevera y no sabes que comer porque nada va a saciarte. La tristeza necesita ser alimentada. Se nutre de ti, de tu congoja por lo que no ves pero prevés. Ese estremecimiento de algo que te acecha, que te ronda y al cual quieres poner barreras, que no fronteras, para que no te traspase, ni te someta. Pero la angustia va creciendo, viajando en tu sangre, llegando al cerebro; doliendo, con un tenue latir de las sienes. Durante todo el tiempo de la travesía por tus venas has intentado combatir, has intentado luchar y cada vez que intentas alejarla la congoja a la derrota se va haciendo mayor. Y ahí ando yo hoy… luchando con esa impresión de que algo está por ocurrir. Con la sensación de que mi estómago es un manojo de nervios que no hacen más que enredarse fuertemente. Con un tintineo constante en el interior de mi cabeza, como si los enanitos estuvieran trabajando a deshoras intentando sacar diamantes de ella. El horizonte esta limpio, todo lo limpio que puede estar en esta ciudad, pero atisbo nubes grises en él y me aterra la conmoción que pueda desatar la tormenta cuando estalle.

07 noviembre 2005

Cartas...

Hoy volví a dejarme vencer, lo vi allí y no pude resistirme.
He vuelto a comparme papel de cartas.
Sí, en un mundo donde los avances tecnológicos están a la orden del día, donde las llamadas de teléfono ha sido sustituidas por los mensajes a los móviles, donde el mail a suplantado al papel, yo sigo comprando hojas de cartas que se van acumulando en la estantería, llenándose de polvo, esperando el día de ser utilizadas. También tengo un boli nuevo para rellenar todos esos folios.
Y lo que es peor, sé que nadie a quien escriba me va a contestar. Es muy triste haber perdido ese hábito y perder tambien el callo de escribir. ¿A que ya no lo tienes igual que cuando estabas en el colegio? no, no, casi te ha desaparecido. Hay que escribir más cartas!!! ¡¡¡yo quiero escribir cartas!!!


¿Quieres que te escriba una?

7 de Noviembre...

El reloj me lo ha dicho después de dejar de observar como las hojas caen de los árboles a través de la ventana y mirar mi muñeca. La fecha ha aparecido ante mis ojos y una imagen se ha ido formando en mi mente. Un recuerdo de adolescencia relegado al fondo de mi saber y durante tanto tiempo sin salir a flote. Hoy Rafa cumple 37 años aunque en mi recuerdo aún no ha cumplido los 18. Para mi sigue teniendo ese pelo rubio de mechones rebeldes cuando lo tenía más largo de lo habitual, le sigo viendo con su jersey gris del que sobresale el cuello de una camisa blanca y su inseparable plumas azul claro en días de frío. Para mi sus manos no se han encallecido al paso de los años, esos dedos largos que agarraban el cigarro tiernamente llevándolo a una boca que siempre quiso ser besada. Su voz sigue resonando en mi cabeza, ahora, sigo oyendo esas palabras de perdón por haberme chillado, por yo ser tan insistente y perseguirlo de aquella manera tan loca. Cosas del amor de mi pubertad y él perder los estribos conmigo. Sigue escrita en el viento su voz cuando me preguntó -¿amigos?- y sus labios besaron las comisuras de los míos. No pude negarme. Recuerdo tantas cosas pasadas, tantos momentos vividos a su lado y en su lejanía; por él nunca sentir lo mismo que yo sentía. Atrás quedan aquellos momentos de tensión por él vividos bajo mi acoso perenne y la vergüenza de ver su nombre escrito en mil colores por los pasillos del instituto. Creo que alguna vez llegó a odiarme, a sentirse mal por yo quererlo y él no poder impedirlo y menos aún corresponderme. Pero el tiempo termina por curarlo todo. A veces deja un regusto amargo en nuestro pasado y otras veces lo miramos con ternura, lo evocamos con cariño y nos preguntamos si viviendo de nuevo esos momentos cometeríamos las mismas tonterías. Estoy segura de que yo haría las mismas, porque al fin y al cabo el amor adolescente puede ser inseguro o tener el valor de mil tigres. No me arrepiento de nada en mis recuerdos de Rafa, ni el pasarme años escribiéndole cartas que jamás fueron contestadas. Sólo me da pena no haber vuelto a saber nada de él y de olvidarme del color de sus ojos.

Quizá otros 7 de noviembre ocurrieron otras cosas, pero hoy me acordé de esta y de sus recuerdos.

A veces el cielo también dice NO...

Aquellos discos de vinilo...


Si, es un disco que compré hace unos cuantos años, jajajaja, no pongáis esa cara, que a mi me gustaba al menos una canción del LP. Claro que hoy al encontrarlo en el fondo del armario y oirlo no sé que canción era. Pero aqui se queda como apunte del baúl de los recuerdos.

03 noviembre 2005

Derrumbando muros...

Creo que ayer sentí un muro caer, una grieta casi invisible lo debió cruzar en algún momento dado sin yo darme cuenta. No te he oído, sólo he leído tus palabras, mi mente ya se encargó de hacerte llegar en forma de bruma dentro de los recuerdos que de ti tengo; que de ti me importan.

He construido un pedestal en torno a ti, le planté flores que luego pisoteé y arranqué en la furia de las mentiras, en el dolor de la pérdida. Las regué con lágrimas porque con odio no pude. Podé sus espinas y una vez secas las atesoré en cajas cerradas para conservar su aroma.
Edifiqué una dicha junto a ti, un sueño por demás imposible y no cejé en un empeño imperativo de mis deseos, de mis noches, de tu persona; sin contar aún con tu presencia.
Erigí castillos de espuma tan frágiles, que como el hielo de verano vi desvanecerse ante la climatología de los afectos, cerqué los sentimientos y bloqueé mi propio corazón por lo absurdo del compromiso, en si inexistente.

Sólo yo era, soy, dueña de ese jardín donde te di forma, donde te creé, donde tú eres el Efebo intachable ante la locura, ante la cordura. Sólo yo debería ser capaz de derribar los muros, de echar abajo las piedras, de ensanchar el camino y cruzar los puentes. Únicamente yo soy responsable de no haber aprendido a dejar de amarte. De permitir que los cuervos invadieran el terreno y no haberlo sabido sembrar de nuevo. La culpable de alejarte y no saber como recuperarte.

Y ayer, por primera vez en mucho tiempo, tu imagen no me arrancó lágrimas, no despertó deseos, no ardió. No había nada. Quizá porque me he acostumbrado a la rutina de los vaivenes del afecto, del amor loco que se convierte en rutina y deja de ser deseo para ser cariño.

Creo que he aprendido a acomodarme a las emociones que me provoca tu presencia.
A VECES ME DA POR PENSAR
QUE LA INDIFERENCIA

PUEDE SEPARARNOS DEL TODO.