22 noviembre 2005

A veces las palabras se acaban, dejando sensación de espejos rotos; se han repetido tanto que el significado se ha perdido, ha flotado en el tiempo. En ocasiones los sentimientos pinchan como agujas a fuego, dejando señales del afilado tormento. Las noches que se cierran en torno a los sueños, las caricias malgastadas, los besos no dados, y sólo queda el silencio. Hay lágrimas que no brotan, que se quedan dentro, hay sonrisas muertas desgarradas en la mueca de un afecto yerto. Hay razones, hay momentos en los que miras el océano y ni un paso de gigante te acercará la otra orilla. Hay poemas que se llevan dentro. Hay amores y hay sufrimiento. Ni la perla es la reina del mar, ni la cobra del desierto.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues sí, hay cosas que se guardan y no se dicen... yo por ejemplo le tengo fobia al te quiero.. pero es que usarlo en exceso puede quitarle todo el sentido y la grandeza que debería tener esa palabra.

Pero no te apagues de nuevo, vamos a hacer el esfuerzo todos y gritar muy fuerte, vale???!!

Un Besazo niña!!!

Anónimo dijo...

Pase a darte un beso.

Anónimo dijo...

Psss, ya sabes d mi relación con los espejos...

Anónimo dijo...

Abrazostes y besotes!

Anónimo dijo...

Pañera, pañera, pañera.................
un beso