A veces me da por pensar que la ciudad es mía
y que sólo yo habito en mis miedos.
Que ni ahogarlos puedo,
porque las olas me los devuelven
más pesados que antes.
Mojados y herrumbrosos,
de aristas afiladas como las palabras,
como las miradas.
Se siguen clavando
Siguen sangrando.
Siguen lastimando.
Sólo yo con mis voces.
Sólo yo con mi dolor.
y que sólo yo habito en mis miedos.
Que ni ahogarlos puedo,
porque las olas me los devuelven
más pesados que antes.
Mojados y herrumbrosos,
de aristas afiladas como las palabras,
como las miradas.
Se siguen clavando
Siguen sangrando.
Siguen lastimando.
Sólo yo con mis voces.
Sólo yo con mi dolor.
2 comentarios:
cómo estamos de prolíficos, no???
Y a pesar de todo, ahí estás tú siempre con tu sonrisa, alegrándonos a todos :-))
Abrazos.
eso, eso, digo como Vulcano, tu sonrisa que no se pierda
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