Para que me voy a molestar en las necedades.
Palabras que necesitas,
y no llegan
Ternuras acotadas.
Recuerdos olvidados.
Y damos tiempo a esas caricias,
de mano en mano,
mientras el ojo vago nos observa.
Retenme
como arena en un frasco.
Como castillo alado.
Como refugio de tempestades.
Óyeme pero sólo cuando yo quiera.
Escúchame ayer.
Atiéndeme mañana.
Siempre ahí.
Sin alas.
Sin cielo.
¿Y quien me oye a mi
Intentando tirar abajo los muros?
Palabras que necesitas,
y no llegan
Ternuras acotadas.
Recuerdos olvidados.
Y damos tiempo a esas caricias,
de mano en mano,
mientras el ojo vago nos observa.
Retenme
como arena en un frasco.
Como castillo alado.
Como refugio de tempestades.
Óyeme pero sólo cuando yo quiera.
Escúchame ayer.
Atiéndeme mañana.
Siempre ahí.
Sin alas.
Sin cielo.
¿Y quien me oye a mi
Intentando tirar abajo los muros?
6 comentarios:
qué racha, madre mía.
¿nos tomamos unas cañitas y nos reímos del mundo?? Andaaaa andaaaa di que sí...
y te doy uno de mis abrazos.
A mi me gustaría pensar que te ayudo y creer que algunas veces lo consigo.
Besos
PD: Me ayudas a pelar la patita de una nécorita?.
Si te sirve de consuelo, yo siempre te escucho. Pro cierto, me han ofrecido un trabajo bastante bueno, ya te contaré.
Hola caracola
;-P
Yo te oigo!!!!!!!!!!!!!!!!
Espero que el prescindir de alas no sea una decisión personal... quedan tan bien...
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